Retomando el análisis de la meritocracia, tratemos de reflejar el típico razonamiento burgués, encerrado en su círculo y olvidándose de cómo llegó a tener lo que tiene y con qué esfuerzo.
Por eso cuando el “Meritócrata devenido en burgués” dice “el que trabaja y se esfuerza progresa, el que no, es un vago sin aspiraciones, un pobre que no merece ni se preocupa por tener más”, debemos recordarle que no siempre es así.
“El neoliberalismo necesita gente pobre, es falsa la idea de que si todos nos esforzamos vamos a ser los dueños de una empresa .La meritocracia es una fábula fomentada por el capitalismo y el neoliberalismo, e implica la sospecha de que los pobres no hicieron lo suficiente para estar mejor”. Nos dice Alejandro Dolina.
Trasímaco, filósofo griego de la escuela sofista sostenía que, “la justicia no es más que la ventaja de los más fuertes” y sostenía también que, “la injusticia (…) es más fuerte, más libre y más magistral que la justicia».
Podemos decir sin temor a equivocación que la meritocracia en Argentina sirvió y sirve para acomodar en puestos principales a individuos que pertenecen a la clase social más dominante o privilegiada (como en cualquier lugar del mundo y salvo raras excepciones) .
Meritocracia se reduce a acomodar políticamente a alguien, o justificar los adinerados o ricos por tener bienes y dinero sin importar su origen (que en realidad sería el mérito).
Es más, algunos meritócratas burgueses devenidos en aristócratas y ricos, reconocen que llegaron a hacer fortuna, de casualidad, incluso por accidente. Reconocen además, que tienen poca o ninguna preparación y que el esfuerzo y el trabajo duro muy pocas veces o ninguna hará un nuevo millonario.
O sea, que a diferencia de lo que siempre nos aconsejaron nuestros padres, el talento y el trabajo duro no sería a veces tan necesario ni suficiente para asegurar el éxito económico. ¿Ayuda ser talentoso?, definitivamente sí, ¿es necesario trabajar duro?, sí totalmente. Pero hay muchas personas realmente exitosas a pesar de no tener ni talento, ni trabajo duro.
O sea, ser pobre no es ser vago, el pobre no quiere ser pobre y en su mayoría no tuvieron las mismas oportunidades de otros afortunados, como ya se dijo. Ser rico y exitoso tampoco significa ser ni talentoso ni trabajador. Por lo tanto la Meritocracia es la forma de convencimiento, un espejismo, que tienen los ricos para que el pobre se esfuerce y así terminar siendo el burgués más rico y también es una forma peyorativa de afirmar que el pobre es pobre porque quiere.
Los ricos en el gobierno tienen estas cosas, son peyorativos con los pobres, odian a los pobres, no quieren ver a los pobres…, pero necesitan de los pobres, sino no, no serían lo aristócrata ganso de cuello duro que son. Odian todo lo que el pobre representa, odian la miseria, pero se aprovechan del pobre y lo explotan para que ese rico sea cada vez más rico y el pobre cada vez más pobre….
EMRYS
superadora le abrimos como sociedad?
