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Para hablar de un determinado tema hace falta conocimiento y retórica adecuada, esto también sucede en el orden ético, donde mi ser se interrelaciona conmigo mismo y con los demás. El camino de las virtudes es el mas difícil, pero sin lugar a dudas es el mas apreciado por el corazón puro del ser humano.
Por supuesto que que el común de la gente es distinto, es fácil hablar y difícil hacer, hablar del camino del bien, de la humildad, de la caridad y del amor al prójimo, es muy sencillo desde el púlpito de nuestra arrogancia. Distinto vivir en el amor al prójimo, vivir la caridad, el amor fraterno y la constancia.
De esto se deduce que lo mas difícil es el camino de la «coherencia», o sea vivir en concordancia con la retórica, o sea amar viviendo desde el amor, tener empatía con el sufriente y llegar sin dobleces al corazón del mas débil.
Vivir la coherencia en un existir ético del corazón del hombre, es la meta sublime del corazón mas puro. Es mirar al mundo a través de los anteojos del Creador mismo, de aquel cuyo nombre es inefable.
Es calzarse las sandalias del pescador por amor y nada mas que por amor y juntos con el próximo, pescar en los mares mas apacibles y mas tempestuosos, en suma es vivir por amor al prójimo las aventuras y desventuras del día a día.
El título mas adecuado para este escrito sería «Coherencia», pero soy temeroso de usar un término que a mi entender, es una virtud de cumplimiento difícil y mas difícil aun, sosteniéndolo en el tiempo, pero no es imposible.
Quiero pues, desprenderme de mis egos y con energía cumplir con el camino que se me ha trazado para esta vida.
INACO
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